
AÑO. 2008
DURACIÓN. 105 min.
PAÍS. Bélgica
DIRECTOR. Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne
GUIÓN. Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne
REPARTO. Arta Dobroshi, Jérémie Renier, Olivier Gourmet, Fabrizio Rongione
PRODUCTORA. Coproducción Bélgica-GB-Francia
Lorna, una joven albanesa residente en Bélgica aspira a comprar un bar con su novio Sokol, para ello se asocia con Fabio, un mafioso de poca monta. Fabio ha organizado un matrimonio de conveniencia entre Claudy y ella para que así pueda obtener la nacionalidad. Según el plan de éste, Lorna debería casarse más tarde con un delincuente ruso que también pretende adquirir la nacionalidad belga, pero para que este segundo matrimonio sea posible, Fabio planea asesinar a Claudy. ¿Permanecerá Lorna en silencio?
Desde luego que no se puede jugar limpio en un mundo sucio. Es lo que no logra entender Lorna.
ResponderEliminarSe domina el cotarro cuando no afloran los sentimientos, en cuantos te despistas, estás perdido: Te ganan la batalla.
El final, me desconcertó bastante, hubiera preferido algo más explícito como un tiro en la nuca y un cuerpo en la cuneta. Seguiría más el ritmo real que lleva toda la película.
Desesperanzador el género humano, sin duda. Y es lo que hay.
Lo que pasa es que ella tenía un poco de lío porque ya se había metido en el ajo con el macarrilla que arreglaba las cosas, las suyas y las del ruso.
ResponderEliminarMe encantó ver a su actor de toda la vida haciendo de inspector de policía por unos momentos, a Olivier Gourmet.
Estupenda película de los Dardenne que en esta ocasión se sirven de un argumento más convencional (las mafias) para continuar hablando de lo que verdaderamente les interesa: en este caso el tema de LA CULPA.
ResponderEliminarLorna se zafa como puede de las continuas solicitudes de ayuda de su marido de conveniencia, como hacen otros con un familiar enfermo y dependiente, sin ceder a la compasión para no perderse del todo. Pero tampoco se siente capaz de soportar el crimen planeado. El tema que los Dardenne plantean, como en otros títulos recientes, es el de la imposibilidad de jugar en dos campos opuestos: o estás con los verdugos o formas parte de las víctimas. De todos modos, la historia cojea en ese asunto de las bodas de conveniencia en cadena. Es inverosímil y llamaría la atención del funcionario más corrupto. Por lo demás, hecha con guante de esparto.
ResponderEliminar